No logra concentrarse en casi nada, las ninfas rehúsan del alimento que las proporciona y no hay musa que avive la hoguera que atesora debajo de la falda que plagia su rencor. No hay camino bajo la lluvia. El agua carda el aliento y macera las esquinas que serán barreño, y las goteras resentidas volverán… Sigue leyendo Añicos
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